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martes, 25 de noviembre de 2014

UN RECUERDO PARA COMPARTIR: JUAN CARLOS PUNTORERO

QUERIDO POR 
'FUNEBREROS' Y 'BOHEMIOS'

Recorriendo la web nos topamos con una nota oportunamente publicada en "Sentimiento Bohemio" por el historiador de Atlanta, Edgardo Imas, dedicada a 'Manija' Puntorero, que nos emocionó y creemos adecuado compartirla con los amigos Chacaritenses.
Haciendo notar que, por cuestiones de espacio y por aludír exclusivamente al conjunto 'Bohemio', hemos eliminado algunos párrafos e imágenes, transcribimos la mayoría de los conceptos allí vertidos:

"Puntorero, ídolo en Villa Crespo y San Martín 

La muerte del recordado volante, que se destacó en Atlanta y luego fue campeón en Chacarita, golpeó fuerte en ambos lugares. Puntorero jugó entre 1962 y 1967 en el Bohemio, y en 142 partidos demostró por qué los talentosos perduran en la memoria de los hinchas. 

Desde hace trece años, en Sentimiento Bohemio damos cuenta de la partida de quienes dejaron su huella en el club. Lamentablemente hemos tenido que informar los fallecimientos de varios futbolistas, dirigentes y socios, algunos perdidos en los entresijos de la historia y otros con algún renombre y más presentes en la memoria. Pero nunca ocurrió lo que despierta Juan Carlos Puntorero, que nos dejó esta semana. Admirado, y ahora llorado, por igual en Villa Crespo y San Martín, por los hinchas y socios de los tradicionales rivales. Pocos despiertan ese sentimiento, ya que en este fútbol exitista, se ensucia fácilmente a cualquiera colgándole el sambenito de traidor, mercenario. 
Manija Puntorero fue distinto. Un jugador talentoso, protagonista. Su cintura y cómo pisaba y manejaba la pelota cautivaron a bohemios y funebreros por igual. Más aún en San Martín, donde integró el equipo que le dio el único título a Chacarita en Primera División, en 1969. Su fama se acrecentó por haberse constituido en la figurita difícil, la que no salía en ningún sobre y que impedía completar el álbum. 
En Atlanta jugó seis temporadas, entre 1962 y 1967. Tuvo la particularidad de debutar y despedirse del club justamente frente a Chacarita —los dos cotejos fueron arbitrados por el mismo referí, Duval Goicoechea—. Su último partido con la camiseta auriazul fue el recordado clásico por la última fecha de la Reclasificación 1967, donde Atlanta ganaba 2 a 0 y terminó perdiendo 3 a 2 en Villa Crespo. La victoria permitió que Chacarita evitara el descenso a la Primera B, y mucho se dijo y se sospechó sobre la manera en que Atlanta perdió ese partido. Algunos de los partidos en que actuó, incluso convirtiendo un gol, son aún recordados porque significaron triunfos resonantes frente a equipos grandes. Tales los casos de las dos victorias que Atlanta obtuvo en la propia Bombonera frente a Boca 1963 y 1964, por 3 a 0 y 4 a 2 —perdía 2 a 0 el Bohemio a los diez minutos de juego—, respectivamente. En el primer triunfo Puntorero convirtió los primeros dos goles bohemios; el arquero xeneize fue Antonino Spilinga. 
Otros dos goles de Puntorero permitieron significativos resultados ante River en el propio Monumental: en 1963, anotó el segundo tanto bohemio que puso el resultado definitivo de 2 a 2, en un partido que ganaba River 2 a 0 con goles de Luis Artime y Ermindo Onega, de penal. Al año siguiente, el Bohemio le ganó en Núñez al River dirigido por el Charro Moreno por 2 a 1. El gol del triunfo auriazul, otra vez Puntorero. En ambos casos el arquero millonario fue Amadeo Carrizo. 
También estuvo presente, aunque sin convertir, en la victoria por 2 a 0 a River en Humboldt en 1964 y en el triunfo por 1 a 0 en cancha de River, en 1966, con tanto anotado por Jorge Fernández. Eran los tiempos en que Atlanta solía repetir frecuentemente su formación en el mediocampo y en la delantera: Puntorero, Raimondo y Salomone; Cabrera, Jorge Fernández y Jorge Domínguez, con la variante, en años anteriores de Carlos Griguol por Raimondo y Luna por Cabrera. 
Otros encuentros memorables que contaron con la participación de Puntorero: 7 a 0 a Huracán en Villa Crespo —máxima goleada bohemia en el León Kolbowski—, con un gol convertido, y el 2 a 2 en Villa Crespo ante el que sería gran campeón del torneo, Racing. Ambos cotejos fueron en 1966. 
El hecho de que después, entre 1969 y 1972, Puntorero actuara en Chacarita permitió que jugara varias ediciones del clásico de Villa Crespo durante una década. Manija estuvo presente en 18 Atlanta-Chacarita: 12 para el Bohemio y 6 para el Funebrero. Esa cantidad de 18 clásicos jugados sólo es superada por los 20 que disputó el legendario arquero tricolor Isaac López, todos para Chacarita. Puntorero sí es el jugador que más clásicos jugó entre quienes lo hicieron por los dos equipos: lo siguen Carlos Spinelli (15), Daniel Carnevali (14) y Juan Antonio Gómez Voglino y Enrique Espinosa (13). 
También, Puntorero es uno de los tres ex jugadores de Atlanta que le marcaron después tantos actuando para el antiguo vecino. El trío lo completa: Osvaldo Tornesi, en 1960; Juan Carlos Puntorero, en 1971, y Osvaldo Damiano, en 1984, con un tanto cada uno. Y siempre ocurrió en enfrentamientos en la Primera División. 
SU TRAYECTORIA DEPORTIVA 
Nació el 21 de febrero de 1942 en Capital Federal. Comenzó en la Novena de Chacarita, pero rápidamente pasó a River Plate, donde arrancó en Séptima y llegó a la Tercera, sin que alcanzara a debutar en Primera División. 
En 1962 Puntorero pasó a Atlanta, junto con los juveniles José Luis Luna y Jorge Fernández, como parte de pago de la transferencia de Luis Artime y Mario Griguol a River. 
Ese primer año jugó mayormente en Reserva, si bien integró en cuatro partidos el primer equipo. En 1963, firmó su primer contrato profesional con Atlanta. 
En 1968, luego de haber registrado 142 presencias y convertido 22 goles, Atlanta lo transfirió a Newell’s Old Boys junto con Juan de la Cruz Kairuz, en la suma global de $18.000.000 y el pase definitivo del futboista Ricardo Vizzo, tasado en $8.000.000. 
Tras un año en la entidad rosarina (25 partidos y un gol), Puntorero fue vendido a Chacarita, quien a la vez cedió a Newell’s al puntero Juan Carlos Montes (el DT que hizo debutar a Maradona, y que había hecho inferiores en Atlanta) y al arquero Jorge Traverso. 
Ese primer año en la entidad de San Martín fue el más significativo de su carrera, ya que se consagró campeón al derrotar en la final por el Metropolitano de 1969 a River en la cancha de Racing por 4 a 1. Petrocelli, Bargas, Poncio, Frassoldatti, Marcos, García Cambón, Neumann, Recúpero y Puntorero fueron los puntales de aquel equipo, que también integró Gómez Voglino. 
En el Funebrero, Puntorero jugó 92 partidos y convirtió 6 goles. ..."

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